La Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA), a través de la Dirección General de Aduanas (DGA), habilitó la posibilidad de que los importadores puedan trasladar la mercadería que ingresen al país a un depósito fiscal y realizar allí las inspecciones físicas y documentales.
La medida, implementada a través de la Resolución General 5644/2025, entrará en vigencia a partir de los 30 días de su publicación en el Boletín Oficial (el 29/1/2025).
El traslado de la mercadería se debe realizar con personal de seguridad, guía satelital y un Precinto Electrónico de Monitoreo (PEMA), que garantice la seguridad e integridad de la carga durante el tránsito hasta su destino.
Esto permitirá a los importadores contar con más flexibilidad y reducir tiempos en el proceso.
Hasta ahora, los importadores estaban obligados a que los contenedores de cargas ya oficializadas en los sistemas de Aduana estuvieran depositados en una terminal portuaria a la espera de su verificación por parte del personal de la DGA, lo que incrementaba los costos operativos, especialmente en los casos en los que la mercadería debía atravesar un control físico por encontrarse en el Canal Rojo de selectividad.